Estas pasando un tiempo difícil, quizás estas atravesando una crisis financiera, un problema familiar, una enfermedad o un problema emocional. La buena noticia es que no tenemos que enfrentarlo solos: Dios está dispuesto a ayudarnos, y su Palabra es un refugio en medio de una tormenta.
El libro de los Salmos es un tesoro de oraciones y declaraciones inspiradas por el Espíritu Santo, que nos enseñan cómo clamar a Dios y confiar en Su respuesta. Cuando declaramos estos versículos con fe, alineamos nuestro corazón con Su voluntad y abrimos la puerta para que Él intervenga.
10 Salmos poderosos para pedir ayuda a Dios
1. Salmo 18:6
“En mi angustia invoqué a Jehová, y clamé a mi Dios; él oyó mi voz desde su templo, y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.”
2. Salmo 46:1
“Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.”
3. Salmo 121:1-2
“Alzaré mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová, que hizo los cielos y la tierra.”
4. Salmo 34:17
“Claman los justos, y Jehová oye, y los libra de todas sus angustias.”
5. Salmo 40:1-2
“Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación.”
6. Salmo 28:7
“Jehová es mi fortaleza y mi escudo; en él confió mi corazón, y fui ayudado.”
7. Salmo 9:9-10
“Jehová será refugio del pobre, refugio para el tiempo de angustia.”
8. Salmo 55:22
“Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo.”
9. Salmo 37:39-40
“La salvación de los justos es de Jehová, y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia.”
10. Salmo 86:7
“En el día de mi angustia te llamaré, porque tú me respondes.”
No importa cuán grande sea el problema que enfrentas hoy, Dios tiene el poder y el deseo de ayudarte. Los Salmos son una guía perfecta para aprender a clamar, confiar y esperar en Él. Nuestra actitud siempre debe ser de humildad para pedir ayuda en cualquier momento, sin importar que el problema sea grande o pequeño.
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